El uso de la medicina tradicional es uno de los principales
métodos de atención a la salud en los países en desarrollo, a pesar de esto,
los modelos hegemónicos que predominan en la gran parte de los países también
han perdido terreno en la atención de la población y junto con ello, se ha
utilizado cada vez más el uso de la medicina tradicional, sin embargo, no toda
la población hace uso exclusivo de cualquiera de éstas dos terapéuticas, en
contraste, utiliza ambas al mismo tiempo, lo que en éste caso, la medicina
tradicional, se denomina desde ese momento como medicina complementaria o
alternativa, debido a que como su nombre lo indica, hace complemento de la
medicina que en determinado momento se está utilizando por una población en
especial o por la mayoría de ellas, es sólo cuando la medicina tradicional se
utiliza como exclusivo método de atención es que se le permite éste nombre.
En la mayoría de los países, se utiliza el modelo de medicina
hegemónica (alopática), sin embargo el uso de una medicina complementaria, se
ha visto elevada con el paso del tiempo, esto se debe a distintas razones
socioculturales, como por ejemplo, la diferencia entre la facilidad para
adquirir la medicina alopática y la tradicional como método de atención a la
salud.
Es por éstos y otros motivos, que la OMS se ha impuesto como
misión en medicamentos esenciales y política farmacéutica, ayudar a salvar vidas
y mejorar la sanidad, esto, cerrando el gran vacío existente entre el potencial
de las medicinas esenciales y la realidad de que para millones de personas,
especialmente pobres, que, las medicinas no están disponibles, seguras o se usan
de forma incorrecta. LA OMS hace esto realizando diversas funciones como por
ejemplo articulando la política y adoptando posturas defensoras, trabajando en asociación,
elaborando guías y herramientas prácticas, desarrollando normas, fomentando
estudios estratégicos y operativos, desarrollando recursos humanos y gestionando
la información., esto con el fin de que cada vez más personas sean capaces de
acceder, tanto a la información como a los modelos de atención a la salud, facilitando
la integración de la Medicina Tradicional y la Medicina Complementaria o Alternativa
en los sistemas de salud nacionales, esto por medio de los siguientes
elementos:
A) Elaborando guías para la Medicina Tradicional/Medicina Complementaria o Alternativa
B) Fomentando el estudio estratégico de la Medicina Tradicional/Medicina complementaria o Alternativa
C) Defendiendo el uso racional de la Medicina Tradicional/Medicina Complementaria o Alternativa
D) Gestionando la información sobre la Medicina Tradicional/Medicina Complementaria o Alternativa.
La estrategia de la OMS sobre medicina tradicional
2002–2005, revisa el estado de la Medicina Tradicional y la Medicina Complementaria
de forma global, y detalla el propio papel y las actividades de la OMS en
cuanto a estas dos formas de atención a la salud. Pero lo que es más
importante, proporciona un marco de trabajo para la acción de la OMS y de sus
socios, a fin de que la Medicina Tradicional y la Complementaria desempeñe un papel
mucho más importante a la hora de reducir el exceso de mortalidad y morbilidad,
especialmente entre las poblaciones más pobres.
Estas estrategias comprenden cuatro objetivos:
1.
Política:
Integrar la Medicina Tradicional y a la Medicina
Complementaria o Alternativa en los sistemas de salud nacionales, desarrollando
e implantando políticas y programas nacionales sobre las mismas.
2.
Seguridad, eficacia y calidad:
Fomentando la seguridad, la eficacia y la calidad de la Medicina
Tradicional y Complementaria o Alternativa, difundiendo los conocimientos básicos
sobre ellas y ofreciendo directrices sobre normas y estándares para el asegurar
la calidad.
3.
Acceso:
Incrementar la disponibilidad de estos tipos de atención a
la salud, según sea apropiado, haciendo
énfasis en el acceso de las poblaciones pobres.
4.
Uso racional:
Fomentando terapéuticamente el uso sólido de una Medicina Tradicional
o Complementaria apropiada por parte de proveedores y consumidores.
BIBLIOGRAFÍA:
World Health Organization. (2002). Estrategia de la OMS sobre medicina tradicional 2002-2005.
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